Publicado en Oblogo 56, del 16 de mayo de 2011.
No se puede decir que se domina el karate hasta que no se enfrenta a un Chuck Norris, y se lo sobrevive. Lo mismo ocurre con el fútbol, y hasta con las mujeres: quien no ha hecho gemir a una hasta el borde de la locura, aún es virgen.
Y también con los idiomas, que es por donde pasa mi historia de hoy. Aprendí el cordobés desde chico, muy chico, fruto de una madre y hermanos oriundos de aquel bendito lugar, y de largas vacaciones en las sierras. Mis años escolares en Buenos Aires, por otro lado, me permitieron ser completamente bilingüe, condición que mantengo hasta la fecha.
La fluidez me ha servido en alguna oportunidad, más en Buenos Aires que en Córdoba, contrario a lo que uno podría imaginar. Los porteños tienden a subestimar ipso-facto a cualquiera que no calce las Y o las LL con la cadencia exacta, y como diría Al Pacino en El Abogado del Diablo, “que no te vean venir”.
Con ese conocimiento que ya tenía desde muy joven pedí mi Mobur y mis Frenys en aquel Pumper Nic de la avenida Santa Fe, hace más años de los que quiero recordar. Me dieron todo en una bandeja amarilla de plástico, buenísima, que por alguna razón supe al instante que tenía que llevarme.
Pero tengo un problema, y es que no puedo robar. No tengo ningún tipo de impedimento moral al respecto, sino que simplemente no me hace gracia. De vuelta a las mujeres como ejemplo, el sexo es bueno si te lo dan. Por la fuerza (equivalente a robar), no tiene ningún sentido.
Eliminada la posibilidad de la sustracción, solo me quedaba convencer a la cajera de que me la regalara. Con mi mejor cara de ganador, y con la panza completa después de haber liquidado el Mobur, la enfrenté. Con una amplia sonrisa, y una tonada cordobesa versión Pampa de Achala.
-Disculpame –bla bla bla- ¿Me regalás la bandeja?
Si le hubiera dicho que me haga un pete se habría sentido menos violentada.
-¿Vos estás loco, nene? Son carísimas. Si se pierde una nos la descuentan.
Hay conflicto tanto en Terminator como en Grey’s Anatomy. Y ahí por cierto que se había plantado uno. Me gustaban y me gustan. A veces. Le charlé acerca de la falta de comederos de categoría en mi ficticia provincia, y de cómo la bandeja sería una muestra de mi paso por la gran ciudad. Ella seguía más dispuesta al pete, pero en algún momento trastabilló y pegó un grito nervioso
-Rubén, el “señor” (si, habló con comillas) quiere llevarse una bandeja.
Rubén probó ser el gerente del prestigioso establecimiento, posición a la que sin duda había llegado con ayuda de la cara de culo que me estaba poniendo en ese momento.
Hay momentos para hablar, y momentos para callarse. Ese, sin duda, era uno de los primeros. Con una verborragia similar a la de Saadi vs. Caputo lo atosigué de anécdotas existentes y no tanto sobre las sierras cordobesas.
El tipo inmutable.
Cuando seguir usando palabras implicaba repetir varias de las que ya había dicho, decidí callarme.
El tipo me miró, y con un movimiento seco levantó la tabla del mostrador. Se me acercó. Mudo.
Me dio un abrazo, y con la tonada más cordobesa que yo haya escuchado nunca me dijo: -Varon, como me hiciste acordar a mi pueblo.
Las cocas se convirtieron en cervezas después de que el Pumper cerró, y hube de batir mi récord en cordobés hablado. Aprendí otras cosas, tales como que puedo inventar un perfil mío en dos minutos y hacerlo durar horas, y lo que es aún más importante, que puedo hacerlo sin fines sexuales
He rascado algún que otro título en la vida, pero el de bilingüe lo saqué ese día. El diploma es amarillo, y tiene forma de bandeja de Pumper Nic.
Excelente
ResponderEliminarq recuerdo el de Pumper, las fernys! q mas decir del diploma del recuerdo.
ResponderEliminarNo podía ser anécdota cordobesa sin ser pa morir de risa, varón. Un anectodonón. (tirando a reliquia eso si... PUMPER NIC!!! jajaa )
ResponderEliminarPodes aflojar, la imagen que me estoy haciendo de vos no tiene nada que envidiarle a un superheroe.
ResponderEliminarMuy bueno Nippur el cuento, o relato , pero esto es un simple mensaje ,que dentro de los laberintos que la gente a veces se maquina para conseguir algo que quiere , siendo autenticos y directos generan resultados mejores que cualquier tipo de estrategia ....ser como somos !
ResponderEliminarPodría decir dos cosas o que sos un cara rota o que sos un genio, las dos encajarían perfectamente.
ResponderEliminarMuy bue relato, como de costumbre.
Saludos!
CRis.
Volví a la infancia por un ratito. :)
ResponderEliminarTrinity Flux
Buenisimo, como todo lo que leo. CRis coincido, no se sabe si es genio, demente o incosciente.
ResponderEliminarY Seguí subiendo textos, que ando re colgada con la historia que venías contando. Aquí espero!
Saludos
me maaaaaaató (léase en Cordobés)
ResponderEliminary quiriri qui ti diga neru, es assis...talento tecleador!
ResponderEliminarbuenisimooo!!!!
ResponderEliminarDistinto, no menos interesante. Lo importante es escribir, soltar los dedos y que estos vayan por ahí liberando historias, relatos, cuentos...Siempre me divierte leer tus cosas, para mi eso es mucho por que en gral todo me aburre un poco.
ResponderEliminarMás contás y más pinta de pendejo turro me das. Sin duda elegiste bien tu carrera.
ResponderEliminarLo bueno de tus relatos, es que pareces ser un tipo que logra todo lo que se propone. en oportunidades, algo caradura, pero mientras no jodas a los demás, está perfecto.
Disfruto mucho de las True Story, preparate para la que se venga en E! cuando seas un famoso escritor.
Abrazo querido!
Sos un groso, Nippur. Sin lugar a duda.
ResponderEliminarYo muchas noches soy Cordobés también. Me llamo Esteban y suelo hacer arreglos de sonidos a bandas musicales conocidas.
Tuvo wenísimo ché cara e cuí!! Hasta me dieron ganas de tené una bandeja amaría!! =) No soy Cordobesa peeeero... la tonada me persigue desde la infancia y se me mete adentro. Muy bueno lo suyo!!
ResponderEliminarcomo le gusta acostumbrarnos a consumir de lo mejor
ResponderEliminarque groso!! siempre dando esos giros inesperados que lo pario! jajajaja muy bueno Carlos!
ResponderEliminarSaludos :)
uh, voy a tener que leer tooooda la historia del blog, muy buen amterial!
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